"El doctor me dijo que le quedaban cinco o seis días... Me senté en una escalera y sentí que se me iba la vida"

"Se avanza entre las llamas del infierno, todo te duele y todo te quema", lamentó Felipe Armas respecto al fallecimiento de su esposa.

"El doctor me dijo que le quedaban cinco o seis días... Me senté en una escalera y sentí que se me iba la vida"
Crédito: Archivo Web
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Durante su paso por el programa "Todo va a estar bien", el reconocido actor Felipe Armas comenzó a desglosar su lamentable situación de vida luego del fallecimiento de su esposa, Claudia. Su gran amor con quien convivió una gran parte de su vida, y que murió producto de un cáncer.

Todo empezó cuando el intérprete relató cómo había vivido los cortes de luz en su casa. Una situación que lo llevó a irse donde sus vecinos a modo de ayuda y, a la vez, sentirse acompañado.

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"Estuve cinco días sin luz, me bañaba en casa de vecinos. A mis vecinos tengo que darles un saludo, porque yo me sentía solo... porque estoy solo", relató. "Desgraciadamente, enviudé".

Felipe Armas
Crédito: Archivo Web

La trágica muerte que aquejó a Felipe Armas

"La Claudita se fue a los 46 años; para mí fue un infierno. Los primeros meses viví en un ala de la casa y no quería salir de ahí", señaló Felipe.

Según comentó Felipe Armas, la trágica muerte de su esposa tiene sus raíces en su primer diagnóstico de cáncer. Una triste noticia que los golpeó el 2016.

"Yo le aconsejo que vayan a examinarse", recalcó el actor. "Ella estuvo cinco años muy feliz, construimos la casa, los perritos y todo, pero un día avanzó como un tsunami. Yo la noté".

"Un día se sentó en la escalera y me dijo ‘no quiero luchar más’. Yo le dije ‘no, Claudia, vamos a salir adelante’. Yo pensaba que íbamos a salir adelante", lamentó.

El camino hacia el final

Poco después, a Felipe Armas le llegó una de las peores noticias que le pudo haber llegado en la vida: Claudia ya estaba llegando a su fin, y no había otro remedio más que llevársela a la casa.

"Duró unos días y estaba furiosa con el doctor, porque el doctor no le dijo que le iba a dejar unos drenajes. Y el doctor me dijo: ‘No te las vas a llevar, a ellas le quedan entre cinco y seis días’. Me senté en una escalera de la clínica y sentí que se me iba la vida", recordó.

Hoy, el dolor no es menor: "Parte de mi vida está en otro lado. Estuvimos 25 años casados y, por alguna razón, nunca nos dormimos peleados. Es una de las mujeres más nobles que he conocido", comentó con nostalgia el intérprete. "Se avanza entre las llamas del infierno, todo te duele y todo te quema, pero ella está en otro lugar y yo lo sé", concluyó.

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